En medio de una conferencia bilateral a la que asistió el embajador de Estados Unidos, Marc Stanley, el ministro de Defensa precisó los faltantes encontrados cuando asumió la gestión de Javier Milei.
En las instalaciones de la Facultad de Ingeniería del Ejército, el ministro Luis Petri asistió junto al embajador de los Estados Unidos, Marc Stanley, a la apertura de la Conferencia Bilateral sobre oportunidades y desafíos en materia de industria para la defensa.
El encuentro se realizó para reunir a miembros académicos, funcionarios del Ministerio de Defensa, autoridades militares y representantes de sectores de la industria para la defensa de ambos países, todo con el objetivo de promover posibles inversiones en Argentina y propiciar el diálogo sobre la innovación tecnológica para la defensa.
Participé de la apertura de la Conferencia Bilateral "Oportunidades y Desafíos en Materia de Industria de Defensa" entre Argentina y Estados Unidos. Desde el inicio de la gestión, el Presidente @JMilei ha promovido la apertura al mundo, reconociendo a Estados Unidos como un… pic.twitter.com/Ts4bgneDTL
— Luis Petri (@luispetri) June 26, 2024
El embajador Marc Stanley abrió con palabras donde habló acerca de los beneficios de la cooperación e interacción de los sectores industriales de la defensa de ambos países. Abordó las innovaciones que surgen y dominan el mundo actual en medio de conflictos y su traslado a sectores como la comunicación digital, entre otros temas de importancia.
La cita se vincula con un memorándum firmado en marzo pasado entre Marc Stanley y Luis Petri para avanzar en cooperación en ciberseguridad: «Refuerza el compromiso de los Estados Unidos de continuar cooperando con Argentina para fomentar la ciberdefensa y nuestra asociación en asuntos de defensa en general», agregó el embajador. Además celebró la adquisición del sistema F16 que «pone a la Argentina en una tecnología de estado del arte» al nivel de los países más desarrollados indicó Stanley.
El anfitrión, el ministro de Defensa Luis Petri, se dirigió al atril del speaker de la ceremonia. El salón de la Universidad de Ingeniería del Ejército Argentino estaba repleto de uniformados, empresarios del sector de defensa nacionales como estadounidenses. Allí, el ministro comenzó diciendo: «La República Argentina y los Estados Unidos tienen una larga tradición de cooperación en materia de defensa que sin lugar a dudas a partir del 10 de diciembre estamos renovando y revigorizando».
Además trazó seguridades en esa línea a los oyentes extranjeros y un panorama de expectativas que sonarían a inversiones: «Esta administración pretende cultivar, potenciar, promocionar y focalizar los ejes en la investigación científica, el desarrollo y el impulso de las capacidades industriales, las actividades que aquí podemos desarrollar incidirán en las industrias de la defensa de ambos países», señaló.
«Todo lo que aquí surja será transferido directamente a mejorar las capacidades de combate de nuestras fuerzas armadas. Con más seguridad, más tecnología y mejores condiciones para garantizar la paz, en la región y en el país y fundamentalmente a los 48 millones de argentinos», aseveró el funcionario nacional.
Luego apuntó con información concreta responsabilizando al gobierno de Alberto Fernández por la situación crítica del complejo industrial de la defensa argentina.
«Al asumir esta gestión en diciembre de 2023 encontramos nuestras industrias de la defensa, nuestras empresas de la defensa en un estado calamitoso y deplorable, con un déficit en la gran mayoría de ellas, con super población y sin producción» disparó el ministro. A esa altura el silencio era total y los empresario norteamericanos presentes se acomodaban los auriculares para no perder palabra.
«Habían transformado a nuestras empresas de la defensa que deben ser motores para el desarrollo estratégico militar de nuestro país en verdaderas cajas políticas que no producían absolutamente nada y que beneficiaban a unos pocos. Voy a dar algunos ejemplos de lo que estoy hablando», argumentó Luis Petri.
«Hay 215 millones de dólares que fueron transferidos por la gestión anterior a las empresas de la defensa y que ya no están. Nos están faltando. Por ejemplo, de17 aviones son 4 Pampas, 3 Pucarás y 10 IA-100 (entrenador básico) para los que el Ministerio de Defensa transfirió los fondos y hoy no se encuentran», destacó el ministro con tono enfático.
«Nos están faltando 12 remolcadores, el ARA Petrel y la corbeta ARA Parker. Todos esos fondos, fondos de los argentinos, se transfirieron a las empresas de la defensa y en lugar de fabricar aviones, en lugar de fabricar municiones, en lugar de hacer el mantenimiento de buques terminaron en cajas de la política. Tandanor, que nos debe 12 remolcadores, se dedicaba a hacer bicicleteros y mobiliario para las plazas», agregó.
«Eso no es estratégico para defender los intereses vitales de la patria. ¿Qué pasó con el proyecto Sara que le iba a permitir a la Argentina tener drones? ¿Dónde están los drones? Habría que preguntarle a Rossi y a Taiana que destinaron 2.000 millones de pesos en 2015 para la fabricación de drones clase-2 y 3», apuntó Petri.
El ministro, prosiguió con más denuncias de faltantes: «No están esos drones y tampoco están los 2.000 millones de pesos o los 200 millones de dólares que se iban a destinar para la construcción del buque polar. No están. Se los llevaron las cajas de la política», criticó.
En otro tramo de su discurso, tomó otro proyecto inconcluso y dijo: «Veamos la remodelación de los tanques medianos argentinos en el año 2010 para 74 tanques. El 10 de diciembre de 2023 asumimos esta gestión y después de 14 años, ¿cuántos tanques se modernizaron? Dos. En menos de 6 meses esta gestión, y aquí hago el anuncio el 9 de julio 5 nuevos TAM van a desfilar por las calles de la Argentina. Son 5 de esta gestión contra 2 después de 14 años. Esto es cambiar el paradigma», señaló.
«Me quiero referir a un hito que no puede pasar desapercibido y que se cumplió el 16 de abril, una compra histórica la compra más importante de los últimos 40 años. Es la compra de los aviones F16 se hicieron numerosos estudios se hicieron infinitas cartas de intención, pero la compra de los F16 no estaba y nos critican el precio porque dicen que 301 millones de dólares es mucho dinero que se paga. Ahora, ¿quién rinde cuenta por los millones de dólares que no están ni en aviones ni en barcos? Deberían rendir cuentas», señaló el ministro.
Y continuó indicando: «En lugar de prestar servicios a los intereses de la defensa terminaron al servicio de los Grabois, de las organizaciones sociales y algunos intereses espurios. Nada tiene que hacer Tandanor firmando con el FISU un convenio por 3,2 millón de dólares para hacer bicicleteros o estatuas de Néstor Kirchner o eventualmente mobiliario para plazas. Tandanor está para fabricar buques, para mantenerlos, no para ponerlo a disposición de los intendentes del conurbano».
Agradeció la participación activa del embajador Marc Stanley en la negociación por los F16 y retomó en ese punto el señalamiento de inconsistencias del Gobierno anterior en la adquisición de cuatro aviones P3 Orion para la Armada Argentina de origen noruego.
«Lo que no decían es que ese contrato obligaba a la Argentina a depositar los fondos a los 30 días de celebrado. Debía hacerse antes de diciembre de 2023. Esos fondos nunca se transfirieron. Eso suponía que el contrato estaba caído, eso suponía que cuatro P3 Orion destinados al control y vigilancia de nuestro espacio marítimo no iban a poder cumplir con su misión porque no iban van a llegar a la Argentina, porque nuevamente la Argentina incumplía la palabra empeñada, incumplía sus contratos», disparó.
Y subrayó: «Lo primero que hicimos fue restablecer la negociación, recomponer el programa de pagos y garantizar que esos aviones llegaran con algo que no estaba garantizado por el gobierno anterior, los radares. Sin ellos los aviones no eran más que aviones de pasajeros».
«Hablamos con el embajador Stanley quien tuvo una parte importante en la negociación y destrabó la situación, los aviones llegarán con los radares e hicimos el pago inicial y en los próximos meses va llegar el primer avión al país», añadió.
Finalizando reiteró la alineación de nuestro país con occidente: «Vivimos en un mundo en guerra y en donde nosotros hemos sido claros en condenar la invasión de Rusia a Ucrania porque afecta su integridad territorial. Condenamos los ataques terroristas de Hamas al estado de Israel y no se puede ser neutral con el terrorismo porque la neutralidad supone complicidad».
Y acotó hechos en línea realizados con la vuelta del país a la agenda de Occidente y el alineamiento militar, citó la participación del país en el congreso de la paz de Ucrania, la inclusión de Argentina en el Grupo de Contacto y Apoyo a Ucrania denominado grupo Rammstein y la presentación ante la OTAN para sumarse como socio global (Partners Across The Globe).